ver

Quien no ha escuchado alguna vez en su vida  

“Hay que cerrar bien los ojos para ver mejor”...

Y es que quizá estamos acostumbrado a ver para creer,

para entender, para tener las cosas claras...

y reflexionando esta expresión llego a la conclusión

que es cierto, hay cosas en la vida que no se tienen

que ver con los ojos para decir “creo”... “es cierto”...

Todos, posiblemente, hemos tenido esta experiencia

de que hay cosas en nuestras vidas que para ver bien,

hay que cerrar los ojos porque el corazón tiene un

modo distinto de ver, de percibir, de descubrir, de entender...

Todos hemos vivido en algún momento ese impulso que

si lo pasamos por la razón, diríamos que somos unos locos,

si nos dejamos llevar por el corazón, se nos ilusiona

la vida y adquiere un sentido de gozo y satisfacción.

Hay momentos en la vida que se nos urge cerrar bien

los ojos para ver mejor... y no creo que eso signifique

que estamos fuera de la realidad de la vida...

Si nuestro trato y relación dependiera de nuestras

propias sensaciones primeras, del calor humano,

dejando a parte las apariencias de quien nos habla,

quizá tendríamos una imagen distinta del otro.

“Las apariencias engañan...”

sí, es cierto, por eso mismo conviene alguna vez

cerrar los ojos para dejar fluir del corazón

los sentimientos más bonitos y bellos....