Con gran malestar y preocupación reciben los padres la leche que el gobierno les vende por la libreta de racionamiento, pues ésta, además de no ser bien aceptada por los niños debido a su mal sabor, ahora la entregan con fecha próxima para su vencimiento. Roxilene Sotolongo Cruz, vecina de Ave. Cervantes # 272, e/ Pinar del Rio y Yumurí, Párraga, Arroyo Naranjo, Ciudad de la Habana; comenta al respecto: "Ya he tenido que devolver la leche en tres ocasiones por el mal estado en que se encuentra, mi niño ha tenido problemas digestivos y ya no quiere tomarla. Cuando mi esposo va a cambiarla le dicen que esa leche es así porque tiene vitaminas, pero eso es mentira, al principio no tenía ese mal sabor, ahora me doy cuenta que solo le faltan días para que se venza, tengo miedo que le suceda algo a mi hijo, esa leche no debe distribuirse en esas condiciones, ya que puede ocasionarle serios problemas de salud a los niños.
 
No entiendo por qué suceden estas cosas, vi ese producto hace meses en las tiendas en divisas y nadie lo compraba, ahora aparece en las bodegas y para colmo vencido. Mientras esto suceda mi niño seguirá sin este alimento tan vital para su desarrollo, pues solo tiene seis años, yo no tengo dólares para comprarla en la shopping y si continúo devolviéndola a la bodega, al niño no le quedará de la leche ni el recuerdo, pues el próximo año, se la quitan (para los no cubanos, significa que no tiene derecho a comprar leche por la cartilla de racionamiento, en pocas palabras, a partir de los siete años, los niños cubanos en su mayoría no prueban leche)".